martes, 20 de diciembre de 2011

¿Por qué te vas?

La Unión Deportiva Salamanca presume de ser un club familiar en el que incluso varios de sus trabajadores llevan años en él desarrollando siempre la misma función o variándola. Ejemplo de ello son Alfonso del Arco (consejero), Balta (jugador, entrenador y director deportivo), Pollo (jugador y secretario técnico), Enrique Miguel (jugador y gerente), José Ignacio Garrido (médico), Eladio Blázquez (utillero) o Alfonso Martín (jardinero).

Que uno de ellos se vaya de la UDS por iniciativa propia se antoja complicado. Sin embargo, hay casos de salidas llamativas de la entidad.

La última de Jonay, según él por motivos familiares, se suma a la histórica de Joao Alves. El portugués, autor del gol que le daba el triunfo al Salamanca en su única victoria a domicilio ante el Real Madrid, se iba a su país por “saudade” (nostalgia). Similar caso era el del defensa Serodio.

De los españoles, había uno que se veía obligado a marcharse. Miguel García se retiraba en la Unión después de sufrir un infarto en un encuentro contra el Betis.

Al final de la misma temporada, la pasada, se producían otras dos sorprendentes salidas. Moratón colgaba las botas para estar más tiempo con su mujer y su hijo, mientras que a Quique Martín, el capitán, se le echaba sin permitirle despedirse de la afición.

Eso mismo le ocurría unos meses antes a Gañán. También portaba el brazalete y tampoco podía decir adiós a la grada. Al menos, se le hacía un homenaje tiempo después.

El tiempo, precisamente, pone a cada uno en su sitio. Eso debe de pensar el técnico Juan Ignacio Martínez, quien para ocultar los problemas que tenía con Juanjo Pascual y no dejar en mal lugar al entonces presidente, alegaba la necesidad de tomarse un año sabático para salir del club. Ahora, entrena al Levante, que está cuarto en Primera División.

A pesar de la espectacularidad de estas salidas, ninguna se compara a la protagonizada en baloncesto por Vanessa Hayden. Sin avisar, la pívot de Estados Unidos dejaba tirado al Perfumerías Avenida para regresar a América. La última vez que se le veía era en la estación de tren acompañada de un oso gigante de peluche.

Eso, de momento, no ha pasado en la Unión, aunque algunos se toman su fútbol como un juego… de niños.


No hay comentarios:

Publicar un comentario